viernes, 16 de octubre de 2009

Cubismo cezaniano (1907-1909)

Se considera que Las señoritas de Aviñón es el primer cuadro cubista. Lo realizó, en 1907, Picasso en su taller de la calle Ravignan, 13 de París, al que llamaban Bateau-Lavoir. Ya el año anterior Picasso había entrado en contacto con obras primitivas, influyéndole sobre todo la exposición que en la primavera hizo el Louvre de escultura ibérica, con los hallazgos de Osuna y el Cerro de los Ángeles; en el verano marchó al pueblecito pirenaico de Gósol, donde pintó una serie de pinturas centradas en el dibujo y el contorno, prácticamente usando sólo el ocre, en espacios vacíos en los que la modelo, Fernande Olivier, aparece en poses discontinuas y con sus rasgos estilizados hasta el punto de parecer una máscara primitiva. A su regreso a París, sus experiencias cristalizaron en las Señoritas de Aviñón, donde se presentan simultáneamente varios puntos de vista, acabando así con la perspectiva ilusionista del Renacimiento.
En el verano,
Braque había estado pintando en L'Estaque paisajes «lineales» que se inspiraban en Cézanne, construidos a base de cubos y que son considerados totalmente precubistas.
Ese mismo 1907, además, se produjeron dos hechos trascendentales. Por un lado, el
Salón de Otoño dedicó una gran exposición retrospectiva a Cézanne, que despertó el entusiasmo de pintores jóvenes fauvistas y otros que luego se incorporarían a la nómina de los cubistas. Por otro, el poeta Apollinaire presenta a Picasso y Braque, iniciándose así una amistad que fructificaría en el desarrollo del cubismo entre los dos. Las señoritas de Aviñón no se expusieron, sino que permanecían en el taller, viéndolo pintores y amigos de Picasso. Braque quedó impresionado y comenzó a trabajar en la misma línea, como puede verse en La Bañista de 1907 o su Gran Desnudo de 1908.
A este primer momento del cubismo se le denomina «cezaniano» por la influencia del viejo maestro en las obras producidas. Los
géneros que predominaban fueron las figuras humanas y los paisajes.
Braque quiso exponer en el
Salón de Otoño de 1908, pero ante el rechazo, celebra una exposición en la galería Kuhnweiler entre el 9 y el 28 de noviembre, presentada por Apollinaire. La visitó el crítico Louis Vauxcelles quien, en el Gil Blas de 14 de noviembre, escribió «M. Braque est un jeune homme fort audacieux... Il méprise la forme, réduit tout, sites et figures et maisons, à des schémas géométriques, à des cubes.» Esto es: El señor Braque es un joven muy audaz [...] Desprecia la forma, reduce todo, lugares y figuras y casas, a esquemas geométricos, a cubos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario